Unas fotos del montaje de lo que ha sido autobiografía apócrifa en la galería Vault.
Directamente desde el avión empezamos a empapelar el espacio que se me había asignado. Una tarea dura pero bien satisfactoria. Un hermosísimo papel rosa estampado con lazos y flores. Se tuvieron que pringar con cola tanto Alba Brazza como Sara Vannacci y Francesco Funghi
A la llegada a Prato, Francesco ya había pasado por la casa de su madre y había robado las lamparas y algunos de los enseres que aparecen en la instalación, aun así tuvimos que dar un paseo a una espectacular tienda de segunda mano.
Mil gracias Alba, Fracesco y Sara por contar conmigo, la ayuda y la atención. Sois los mejores.